Las relaciones comerciales y las políticas energéticas internacionales se han convertido en temas de gran relevancia, especialmente en lo que respecta a la producción de petróleo y sus implicaciones económicas. Diego Mateos, CEO de GESE, compartió su perspectiva sobre varios temas energéticos cruciales en una entrevista con Negocios Televisión, abordando aspectos clave que impactan tanto a Canadá como a Estados Unidos, además de señalar cómo las sanciones internacionales afectan el mercado global de la energía.
La relación comercial entre Canadá y Estados Unidos: Desafíos y oportunidades
La jefa de Gobierno de Alberta, la conservadora Danielle Smith, advirtió en una rueda de prensa que, si el Gobierno canadiense responde a los aranceles del 25 % impuestos por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, con un embargo petrolero, Canadá se enfrentaría a una «crisis de unidad nacional», además de generar una profunda tensión con Estados Unidos.
Respecto a este debate, Mateos subrayó que los aranceles del 25% que podrían aplicarse a las importaciones de petróleo canadiense afectarían directamente la competitividad del mercado. «El problema que tiene Canadá, es que si tienen unos aranceles del 25%, dejan de ser competitivos en el mercado» dado que ambos países dependen del mercado de la energía para su crecimiento económico.
Por otro lado, Trump lleva varias semanas “bromeando” con la idea de anexionar a su vecino Canadá como el estado número 51 de Estados Unidos. Y es que, si se hiciera con Alberta ya podría cubrir la totalidad de su demanda de petróleo anual, sin embargo, Mateos no lo ve algo probable: «Creo que es algo que no va a ocurrir, es una población en la que ellos antes de anexionarse a EEUU ven que pueden ser independientes a Canadá».
El petróleo de Alberta y sus desafíos
Alberta es conocida por ser uno de los mayores productores de petróleo de Canadá, pero su petróleo tiene características particulares que lo hacen más complejo de tratar. En este sentido, el entrevistado destacó que «el petróleo que viene desde Alberta es un petróleo que viene de arenas bituminosas, no es un petróleo fácil de tratar«. Este tipo de petróleo requiere procesos adicionales para su refinado, lo que aumenta los costos de producción y hace que los aranceles puedan tener un impacto aún mayor.
El problema se complica aún más al considerar que gran parte de este petróleo es refinado en Estados Unidos, lo que genera una interdependencia entre ambos países. Según nuestro CEO, «gran parte del refinado se hace en Estados Unidos, prácticamente tendrían problemas hasta para tener su propia gasolina», lo que subraya la estrecha relación que existe entre los mercados de energía de ambos países.
Sanciones internacionales: Consecuencias para el mercado global del petróleo
Otro de los temas clave abordados en la entrevista fueron las sanciones internacionales, particularmente las impuestas por Estados Unidos contra Rusia y las posibles sanciones a Irán. La situación es clara: las sanciones a las exportaciones de petróleo ruso están afectando a los precios globales del crudo, y Diego Mateos explicó que esto es una consecuencia directa de un mercado globalizado.
«Desde el momento en el que Estados Unidos tiene que importar parte de su consumo anual, lógicamente les va a afectar, porque van a tener que comprar en un mercado globalizado esos 4 millones de barriles diarios que necesitan de su demanda interna», afirmó, destacando cómo la dependencia energética de Estados Unidos sobre el mercado internacional genera una vulnerabilidad ante cualquier alteración del suministro.
La subida de precios del petróleo: Un efecto global
El aumento en los precios del crudo es una de las consecuencias más evidentes de las sanciones y las restricciones comerciales. Tal como señaló el entrevistado, «subirá para todos«. Esto significa que, aunque algunas naciones puedan beneficiarse de los altos precios, los consumidores de todo el mundo se enfrentarán a mayores costes. La situación se vuelve aún más compleja cuando se considera que, en el caso de Estados Unidos, la necesidad de importar crudo para satisfacer su demanda interna hace que cualquier aumento en los precios afecte tanto a la economía nacional como a los precios de los combustibles.
Las empresas de servicios energéticos como GESE están bien posicionadas para ayudar a sus clientes a enfrentarse a estos desafíos, ofreciendo soluciones que promuevan la eficiencia. En este entorno dinámico, la capacidad de adaptarse y optimizar el consumo de energía será fundamental para el éxito a largo plazo.